El vinagre, el detergente y el bicarbonato de sodio son imprescindibles en el hogar porque ayudan a solucionar cualquier problema, a limpiar y desinfectar la ropa, y mucho más. Al mezclarse crean una increíble reacción química, que consigue eliminar la suciedad más rebelde. Ahora vamos a redescubrir todas las propiedades de estos tres productos para entender cómo utilizarlos mejor y obtener grandes beneficios de ellos.
Las abuelas usaban solo productos naturales, por eso Juntar vinagre, bicarbonato de sodio y detergente es el consejo clásico y atemporal de la abuela. Érase una vez que era necesario limpiar la casa y no había dinero para comprar productos higienizados, etc., las abuelas usaban estos tres artículos.
De hecho, el vinagre, el bicarbonato y el detergente consiguen eliminar cualquier mancha de la ropa, higienizándola de forma económica, rápida, ecológica y natural. Para los no iniciados, el vinagre es incluso bueno para el cabello, lo hace saludable y elimina la caspa mejor que cualquier otro champú elaborado para este problema.
Si combinas estos tres productos podrás decir adiós a los detergentes químicos, que no sólo perjudican tu salud, sino que a la larga causan grandes problemas a tus tuberías.
Desatascar desagües y eliminar moho nunca ha sido tan fácil
Por ejemplo, para desatascar desagües, si mezclas un poco de vinagre, un poco de bicarbonato y un poco de detergente, obtienes una mezcla increíble que es capaz de liberar cualquier tubería de cualquier atasco, pero también de la cal y los mohos resistentes.
Luego también pueden actuar como desinfectante en el baño, basta con mezclar dos cucharadas de bicarbonato de sodio, 60 ml de vinagre, 500 ml de agua y unas cucharadas de líquido lavavajillas y listo.
Lo que se creará será una milagrosa reacción efervescente que, pasada sobre la zona a tratar, desinfectará todo en profundidad eliminando cualquier tipo de mancha.
Quite las manchas de la alfombra con vinagre, bicarbonato de sodio y jabón para platos.
Hablando de manchas, las que hay que quitar de las alfombras son la mayor desesperación de las amas de casa.
El bicarbonato de sodio tiene agentes absorbentes y blanqueadores que actúan profundamente, eliminando la suciedad sin cambiar los colores, reviviéndolos. Por eso sólo debes utilizar esto para disfrutar de un resultado perfecto.
Así que basta con juntar dos cucharadas de bicarbonato de sodio que equivalen a 20 gramos, 125 ml de vinagre y un poco de detergente líquido. Luego el compuesto se aplica directamente sobre la laca. El truco para tener un suelo impecable: no quedará mancha alrededor y se deja actuar al menos 5 minutos. Finalmente procedemos a tratar la zona utilizando un cepillo de dientes quizás usado para que no quede excesivamente áspera.
Una vez terminado, las manchas habrán desaparecido por completo. Lo mismo ocurre con cualquier tipo de ropa, manchas en la pared, para el fregadero de la cocina o para eliminar los malos olores del frigorífico.
En este caso, añade 60 ml de vinagre blanco, 60 ml de agua, 50 ml de bicarbonato de sodio y una cucharadita de líquido lavavajillas. La mezcla se rocía sobre el frigorífico incluyendo las puertas y cajones hasta las esquinas.
Luego limpia con un paño húmedo para quitar el detergente, luego seca todo con una hoja de papel de cocina.