La maternidad es una etapa amada por algunos y difícil para otros, pero no se puede negar que es algo hermoso, pero durante el embarazo y el puerperio ocurren grandes cambios en tu cuerpo.

Es un proceso natural en el que el cuerpo de la futura madre debe adaptarse para albergar al feto, que irá creciendo con el paso de las semanas, para que luego se vea sometido a una gran carga hormonal con los cambios físicos y mentales que todo ello conlleva.

Después del parto, el cuerpo y la mente sufren muchos cambios.

La mujer debe adaptarse a una nueva situación: ser una más. Algunos de estos cambios pueden durar hasta el posparto o el período posparto, como el aumento de peso o cambios en el piso pélvico que a veces pueden provocar pequeñas pérdidas de orina.

Estos son los cambios que hace el cuerpo después del parto

Cambios en la piel después del parto

La aparición de estrías, hirsutismo (crecimiento de vello) y acné por carga de andrógenos, manchas en la piel y caída del cabello son las más comunes.

La hiperpigmentación ocurre en todas las mujeres, pero en mayor medida en aquellas con piel y cabello más oscuros. La línea alba, la zona periumbilical, las areolas y los genitales externos están más intensamente pigmentados. El cloasma gravídica también es común y consiste en manchas marrones en las mejillas, la frente y el labio superior. Todas estas lesiones suelen mejorar a los pocos meses de dar a luz. Para minimizar su aparición, se recomienda utilizar cremas solares con un factor de protección alto (50) y evitar la exposición prolongada al sol.

Las estrías aparecen en más de la mitad de las mujeres embarazadas y principalmente en el abdomen. Aparecen en el tercer trimestre y se han asociado con antecedentes familiares de estrías, embarazo precoz, niños de alto peso e índice de masa corporal alto. Decir que una correcta hidratación de la piel antes y durante el embarazo puede minimizar la aparición de estrías. El aumento de peso controlado también disminuye su apariencia.

En el puerperio, la pérdida importante de cabello suele ocurrir entre el primer y el quinto mes después del parto. Las uñas durante el embarazo se vuelven más quebradizas.

Miomas blandos: son pequeñas pápulas pedunculadas que aparecen en los pliegues del cuello, axilas o pliegue inframamario a partir del segundo trimestre. Muchos desaparecen después del puerperio.

Todos estos cambios desaparecerán dentro de 6 meses a 1 año. Si persisten más tarde, pueden ser tratados específicamente por su dermatólogo.

Cambios cardiovasculares

Durante el embarazo se produce un aumento del volumen sanguíneo, dilatación vascular, aumento de la permeabilidad vascular y formación de nuevos vasos. Todo esto provoca hinchazón de manos y pies, eritema palmar (enrojecimiento de las palmas de las manos), arañas vasculares, varices, arañas vasculares, hemorroides, especialmente en el tercer trimestre del embarazo. Muchos de estos cambios desaparecen unos meses después del parto, pero algunos de ellos, como las varices o las hemorroides, pueden persistir y requerir tratamiento si son muy molestos.

Cambios en los senos

Los senos aumentan de tamaño a partir del primer trimestre, lo que puede ser algo vergonzoso. Se están preparando para la lactancia. Es importante cuidarlo durante el embarazo para evitar la aparición de grietas y estrías. Para ello, existen multitud de productos comercializados para su cuidado específico.

Cambios en el abdomen

A medida que avanza el embarazo, el abdomen sufre cada vez más cambios. Se produce dehiscencia (separación) de los músculos rectos del abdomen, que en algunos casos puede ser muy grande y precisar reparación quirúrgica, aunque en la mayoría de los casos se resuelve con fisioterapia de la pared abdominal. El abdomen vuelve a su estado anterior al embarazo de 6 a 9 meses después del parto. La recuperación depende mucho del aumento de peso durante el embarazo y del estado físico de la mujer antes del embarazo.

El diafragma urogenital, que tiene que soportar mucho más peso, también se ve afectado y es la causa de las molestas pérdidas de orina durante y después del embarazo.

Cambios de humor

Durante el embarazo la carga hormonal es muy alta y cuando das a luz, la bajada brusca de hormonas puede provocar cierto estado de depresión. Esto, combinado con una nueva situación que a veces nos agobia y el cansancio, puede derivar en depresión posparto, que afortunadamente en la gran mayoría de los casos es leve o moderada.

error: Content is protected !!